Recientemente se han cumplido dos años desde que nos enteramos por un comunicado de la Casa Real marroquí, del cambio de postura del presidente Sánchez con respecto al Sáhara Occidental a través de una presunta carta, de la que el propio Gobierno español es incapaz de hacer público el original y que Pedro Sánchez dijo haber remitido a Marruecos.
Se nos vendió, que tras el cambio de postura, se abriría una “etapa sin precedentes” en las relaciones entre España y Marruecos y esta etapa se formalizó con un acuerdo de 16 puntos que se publicaron tras la visita a Marruecos del presidente Sánchez en abril de 2022.
Como se sabe Marruecos cerró en marzo de 2020 las aduanas de Ceuta y Melilla. Es fácil entender que el cierre de las mismas ha supuesto un importante coste económico para las dos ciudades autónomas. A día de hoy y tras el acuerdo firmado, las aduanas siguen cerradas para desesperación de los comerciantes y ciudadanos de ambas ciudades.
Marruecos aún sigue insistiendo en ampliar sus aguas que en la actualidad pertenecen a Canarias y sigue exigiendo gestionar el espacio aéreo del Sáhara Occidental.
En el plano internacional, recientemente la abogada de la UE, ha publicado dos opiniones respecto a los acuerdos UE-Marruecos comerciales y de pesca por un lado, y sobre el etiquetado de los productos que provienen del Sáhara Occidenta por otro.
La abogada de la UE ha concluido que el Acuerdo de Pesca debe anularse, porque “no respeta suficientemente el carácter “separado” y distinto” del territorio del Sáhara Occidental y las aguas adyacentes”. Y sobre el etiquetado ha afirmado que éste debe llevar una referencia al “país de origen” que refleje correctamente su procedencia y que éstos productos (sandías y tomates) no pueden indicar Marruecos como país de origen”.
Todas las sentencias de los tribunales de la UE han reafirmado desde que en 2015, el Tribunal General de la UE anulara la aplicación al Sáhara Occidental del acuerdo comercial UE-Marruecos, que el Sáhara Occidental es un territorio separado y distinto de Marruecos.
Como respuesta a estas opiniones de la abogada de la UE en las que apoyaba el estatus legal del pueblo del Sáhara Occidental, el Gobierno alauita ordenaba días después, maniobras militares frente a las costas canario-saharauis para tratar de lanzar un mensaje a la UE para que quede clara la “soberanía” de Marruecos sobre esas aguas después del varapalo recibido.
Este despropósito marroquí, lo realiza una vez más calentando la “zona gris” del conflicto a sabiendas de la tibieza de España y su voluntad de no actuar ante las continuas provocaciones que hace Marruecos. Sigue utilizando la inmigración en función de sus intereses, y como niño mimado al que se le da todo lo que pide, ha aprendido y usa a voluntad la inmigración para presionar a Europa y, especialmente, a España.
Cabe recordar el asalto a la valla de Ceuta en el que como recordó el parlamento Europeo, Marruecos utilizó a migrantes, principalmente a niños marroquíes, para presionar a España y conseguir cambiar su política respecto a la cuestión saharaui.
Recientemente el presidente Sánchez compareció en el Pleno del Congreso de los Diputados para hablar de las relaciones España-Marruecos. No pronunció ni una sola referencia al Sáhara Occidental. De nuevo, PP, Sumar, ERC, BNG y CC, le volvieron a reprochar la falta de explicaciones al giro radical que dio respecto al Sáhara sin obtener respuesta alguna del presidente. Es el día de hoy en el que todavía sigue sin dar explicaciones del cambio de postura.
Llegados a este punto cabría preguntarse: ¿Qué motivó al presidente Sánchez a romper un consenso sobre la excolonia de la que España sigue siendo potencia administradora? ¿Pudo deberse al espionaje del contenido de sus móviles con el sistema Pegasus? ¿Qué beneficios ha obtenido España? ¿Que ha llevado al presidente a seguir en una sinrazón en la que no le apoyan ni siquiera sus socios de Gobierno? ¿No resulta un poco hipócrita, como se le ha dicho en sede parlamentaria, darse golpes de pecho por Palestina mientras abandona a los saharauis?
Enrique Gómez Caballero, miembro de Um Draiga autor del libro “Una mirada la Sáhara Occidental”
Publicado en el Heraldo de Aragón el 18 de abril de 2024